La presa de Santa Clara (anteriormente conocida como presa de Marcelo Caetano) es una presa situada en el río Mira, en el municipio de Odemira, en el litoral alentejano, cerca de la frontera con la región del Algarve. Se encuentra ubicado en la parroquia de Santa Clara-a-Velha. Alguna vez fue la presa portuguesa más grande. Fue construido con el objetivo de regar toda la comarca.
Mandado construir por el Estado Novo, el embalse tiene una superficie de 1986 hectáreas, siendo considerado uno de los más grandes de Europa. Alimentado por el río Mira, desde Santa Clara el agua discurre por 84,9 km de canales, 50,4 km de distribuidores y 309,6 km de aspersores.
Inmerso en un imponente paisaje montañoso, el espejo de agua de Santa Clara es uno de los puntos de mayor interés turístico del interior del municipio de Odemira. Un paseo por este gigantesco lago permite observar sus innumerables rincones e islotes, casi siempre con un paisaje forestal como entorno.
Desde el muro o desde lo alto del Cerro, la grandeza de la presa es impresionante. En sus aguas se puede practicar piragüismo, remo o pesca deportiva, y abundan las lubinas, el pimpão y las cigalas.
Un lugar tranquilo, es ideal para los amantes de la caza, la pesca, los deportes acuáticos o simplemente para un período de descanso en perfecta armonía con la naturaleza. Con una situación única, frente al dique de frente y rodeada de cerros y valles, cubiertos de una intensa vegetación. A pocos kilómetros, el pueblo de Santa Clara-a-Velha merece una visita cuidadosa y prolongada.
El pueblo, blanco y florido, se desarrolló a la sombra de la Iglesia de Santa Clara de Assis, conservando su carácter rural. Destaca también la Fonte do Azinhal, que data de 1892 y fue restaurada en 1995, junto a la cual hay un agradable merendero. Junto al camino de acceso a la presa, destaca el Ponte de D. Maria, o Puente Romano, como también se le conoce. Fuentes: Wikipedia, https://turismo.cm-odemira.pt/